Encadenada a tu amor.

Me siento prisionera de este amor, me siento sin salida, ya no puedo arrancar. Él me tiene prisionera, me maneja como quiere; esto me tiene enferma, pero enferma de amor, locura, deseos de verlo, de rosar mis manos en su rostro... Darle caricias que le den protección y recibir abrazos que me entreguen amor.

Su conquista, su encierro, se produjo sin deseo, deseo de que él quisiera, deseo que nunca pasó por su cabeza y yo estoy aquí encadenada a su amor, amor que quizás nunca llegara, amor que le dará a otra por no saber que yo aún estoy esperando, esos besos y abrazos que por años he anhelado para estar a su lado...

Le insinuó cosas, pero el piensa que son de juego, juego de una niña que no sabe lo que dice, juegos de niña que no sabe lo que es amar, juegos que al principio mostraban alegría y ahora una desesperación y amargura por no saber como expresar lo que siente, por no saber decir la verdad que hay en su mente. Deseo que crece, verdad que sale de lo más profundo de su cuerpo, deseo de confesar lo más oscuro, pero que a la vez brilla como el sol de sus ojos que muestran solo amor y que sueña con que sus ojos guíen al hombre al cual le pertenece ese brillo de soles, ese brillo tan agradable que solo atrae a la gente y les muestra lo que ella siente.

Pero ya se hace tarde y sus ojos se cansan de llamar, de buscar entre los corazones deseosos de hallar el brillo que les corresponde, sus ojos se van cerrando entre cada palpitar de su llanto, los ojos decaen y su brillo se apaga por un instante... instante en que el amor correspondiente a ese llamado no alcanza a verlo y cree que es otro sueño y que su amor esta muy lejos...

Mientras yo me envuelvo en tu amor que me esta matando... me entierra espinas de engaño, me entierra un puñal en mi corazón y me deja sufriendo, y me deja muriendo...

Mientras tanto tendré que seguir en la busca de la forma correctas para decir la palabra más dulce y completa de este mundo que solo entrega la alegría de un ser que a nacido solo para amar y proteger a su cuerpo y al de él...

No hay palabra más dulce que...

.........................TE AMO..........................